Los derroteros que está cogiendo radio 3 realmente inquietan y desesperan. Hay momentos que se marcan a fuego, como descubrir a maceo en area reservada o escuchar a diego manrique pinchando el white lines en una fiesta pop del el jai alai. los enfermos de musiquitis me entenderéis. A Manrique lo han echado de manera muy cutre, sustituyendo el ambigú por reposiciones, ni siquiera con algun nuevo espacio hueco modernillo de esos que "renuevan" la cadena. Y él se despide emitiendo el superconciertazo 70´s de James Brown en Kinshasa, inmortalizado en la peli
Soul Power.
Hay programas que no desaparecerán nunca. Aunque directivos miopes se empeñen, siempre escucharemos turbulencias sonoras... en casa de tu prima la coja.
Gracias, Diego A. Manrique
Escucha el podcast del programa